RAMÓN CRUZ BENZÁN
SANTO DOMINGO.-Pedro Castillo, ex presidente del Banco del Progreso, ratificó ayer que el contrato de fusión suscrito con Ramón Báez Figueroa, el 24 de marzo del 2003, con su anexo único contentivo de su total de activos y pasivos, por más de 80 mil millones de pesos fue aprobado por la resolución de la Junta Monetaria de ese día.
Al ser interrogado por su antiguo abogado y asesor legal, el licenciado Francisco Álvarez Valdez (Pancho), en su nuevo rol de abogado del Banco Central, Pedro Castillo declaró “usted mejor que nadie sabe cómo ese acuerdo, con su anexo que usted redactó, se envío ese día a las autoridades monetarias, por que usted era en ese entonces mi abogado encargado de entregar esa documentación a las autoridades monetarias”.
Con signo evidente de desconcierto el licenciado Álvarez Valdez, le preguntó a seguida al testigo Pedro Castillo, que si a él le constaba personalmente que esa documentación le fuera entregada a las autoridades el 24 de marzo del 2003, a lo que éste respondió “la mayor prueba que puede haber de que las autoridades recibieron esa documentación, es que esa misma noche la Junta Monetaria, emitió una resolución en la que expresa su no-objeción al contenido de ese acuerdo de fusión; y eso fue lo que se publicó en todos los periódicos al día siguiente”, expresó el testigo.
Testigo dice supervisión bancaria era inexistente antes de la crisis
El ex presidente del Banco del Progreso, reveló que antes de la crisis bancaria del 2003, la supervisión bancaria en el país era prácticamente inexistente y refirió que el ex vicegobernador del Banco Central, Luis Manuel Piantini había revelado en días pasados que a esa fecha, catorce bancos del sistema presentaban problema de liquidez y descapitalización.
Interrogado por Carlos Salcedo, abogado del Banco Central, acerca de la existencia de malas practicas de gestión en los manejos de bancos, el testigo reveló que las mismas eran parte de un sistema. “ Esa eran las reglas de juego en la banca dominicana, eran problemas sistémicos, que después de la crisis y de las auditorias asistidas que se hicieran con posterioridad a ésta, fueron abordados por nueva regulaciones y políticas de la autoridad reguladora”, expresó el ex presidente del Banco del Progreso.
Defensa de Báez considera trascendental testimonio de Castillo
El licenciado Castillo Semán, abogado de Báez Figueroa, consideró que las declaraciones de Pedro Castillo, acerca del anexo único del contrato de fusión es fundamental para la defensa del ex presidente del Baninter.
“El hecho acreditado ante el tribunal, de que Báez Figueroa, el 24 de marzo del 2003, de forma voluntaria hiciera constar por escrito el valor de activos y pasivos consolidados por mas de 80 mil millones de pesos en el contrato de fusión y que este fuera enviado a las autoridades monetarias ese mismo día, quienes dieron su no objeción al mismo, es un hecho capital para probar la falta de intención de crimen o delito”, expresó Vinicio Castillo Semán.
“La desesperación del colega Pancho Álvarez, tratando de negar que ese acuerdo con su anexo único, fuera conocido por las autoridades se explica porque tiene plena conciencia de que ese es un hecho que destruye uno de los elementos esencial de la infracción como es la intención. Simple y sencillamente esta probado que Ramón Báez Figueroa no ocultó el tamaño de los activos y pasivos del banco, ni al banco del Progreso, ni a las autoridades”
“Para mala suerte del amigo Pancho Álvarez, Pedro Castillo, simple y llanamente lo barrio con sus repuestas al develar que fue el cómo su abogado, uno de los actores fundamentales de ese proceso y el encargado de llevar esa documentación de la fusión a la autoridad”, enfatizó Castillo Semán.
